sábado, 21 de mayo de 2011

Tarta para un gran padre

Este fue el regalo que quise llevar a una gran fiesta que me invitaron. Es la fiesta de mi Primo y celebraba la curación de una enfermedad muy dura pero felizcmente terminada.
La verdad que no sabía que regalar a un hombre y que no sea muy ñoño. Me pasaron un montón de ideas, pero al final me decidí por esta. Le preparé un atarta con los perfiles de sus hijos.
Había fotos de todas posturas, pero precisamente de perfiles y el mismo tamaño, no. Aquí tuve que pringar hasta su seño, y le mandé la cámara de fotos y me hizo el favor. Muchas gracias, señorita Pili.
El bizcocho fue un Red velvet y todos quedaron satisfechos, gustó mucho.